
Dale un buen trato a tu piel, aprendiendo a cuidarla con estos trucos que te ayudarán a mantenerla joven y muy sana. Tenlos en cuenta y evita desde leves y dolorosas quemaduras, hasta manchas, escamas, resequedad, arrugas y cáncer de piel.
Regla de oro: aplícate todos los días bloqueador solar
Utiliza bloqueador solar, con un factor mínimo de protección de 15 (FPS), para el rostro, cuello, brazos y toda la piel que quede expuesta. Normalmente, se recomienda aplicarse protector solar varias veces al día; en la mañana, al medio día y a las 3:00 pm.
Si sueles nadar o practicar algún deporte subacuático, utiliza bloqueador a prueba de agua.
Protege otras zonas sensibles
Algunas personas, con frecuencia, se olvidan de proteger zonas sensibles como la parte superior de las orejas, el cuero cabelludo, el pecho, así como la nariz y las manos.
El 80% de los cánceres de piel se producen en la cabeza, barbilla, cuello y manos, según la fundación estadounidense The Skin Cancer Foundation. Así que para proteger zonas tan sensibles como el cuero cabelludo, esta organización recomienda usar sombreros de lona con tejido apretado y por supuesto, bloqueador solar.
Evita ponerte citas con el sol
Trata de esconderte del Sol entre las 10:00 am y las 4:00 pm. Ten en cuenta que además del uso de bloqueador solar, ponerte gorras o sombreros puede ser una buena opción. Incluso vestir prendas oscuras con tejidos ajustados para que los rayos ultravioleta no traspasen la ropa y no lleguen a tu piel.
Ten en cuenta que los materiales sintéticos como el poliéster tienen un nivel de protección UPF mayor que la ropa confeccionada algodón.
Cuida con las rutinas de bronceado
Si te derrite lucir una piel bronceada, debes tener en cuenta que esta es una rutina no muy saludable para tu piel, incluso, si eres de tez blanca será muy difícil conseguir un tono dorado o moreno, pues normalmente lo que se logra es un enrojecimiento con cierto grado de dolor y quemaduras.
Pero si definitivamente te niegas a renunciar al Sol, tómalo con calma y deja que tu piel gradualmente acumule melanina, sustancia natural que te proporcionará cierta protección.
Evita los aceites bronceadores, ya que estos potencializan los efectos de los rayos ultravioleta y empeoran las quemaduras, puedes dejar que tu piel tome más color, poco a poco con bloqueador solar.
Luz invernal también puede actuar sobre tu piel
Así llueva, truene, relampaguee o te encuentres en un lugar cerrado, aplícate todos los días protector solar.
Recuerda que durante los días nublados y fríos también aparecen rayos dañinos que que se filtran por entre las nubes.
De hecho, si estás entre la nieve o en altitudes altas, donde también hay vientos borrascosos puedes correr el riesgo de sufrir graves quemaduras. Así que lo mejor es que utilices la ropa adecuada, gafas con filtro UV y te protejas con bloqueador solar en el rostro.
Ojo con ciertos medicamentos
Algunos medicamentos como los diuréticos y la tetraciclina pueden producir mayor sensibilidad en tu piel a la exposición solar, aumentando el riesgo de quemaduras.
Es importante que consultes con tu médico y sea él quien te dé el visto bueno con respecto al consumo de estas sustancias, para evitar cualquier contraindicación.
Camas y cámaras de bronceado
Esta alternativa de bronceado es bastante cuestionada, puesto que muchas camas y cámaras para estos fines utilizan rayos UVA, los cuales son muy peligrosos porque penetran la piel con mucha profundidad, causando piel seca, arrugas y aumentando el riesgo de cáncer de piel.