Cualquier operación genera cierta sensación de ansiedad, de ahí la importancia de resolver todas las dudas y estar seguros de la decisión.
La reconstrucción mamaria es una operación de cirugía estética para recuperar la forma de los senos generalmente tras una mastectomía, parcial o total. El primer consejo es que es una decisión personal, la cual debe tomar la mujer sin condicionantes ni presiones. De igual manera hay que señalar que la mastectomía, la extirpación total o parcial de la mama como parte del tratamiento contra el cáncer de mama, puede tener un fuerte impacto psicológico en la mujer. Es decir, no se trata de una mera cuestión estética, ya que recuperar la forma de los senos puede ayudar a la mujer a sobreponerse más rápido y, sobre todo, a fortalecer la autoestima y a eliminar el sentimiento de pérdida de identidad femenina.
El segundo consejo, igual de importante, es que siempre hay que ponerse en manos de un profesional de la cirugía estética, consultando previamente al oncólogo y cirujano sobre la mejor opción. Todas las dudas que surjan deben ser resueltas, y para ello es importante conocer en qué consiste exactamente la operación de reconstrucción mamaria. Ello nos permitirá abordar el proceso de una manera más segura y confiada.
El desarrollo de nuevas técnicas, tal y como subrayan desde la Sociedad Española de Senología y Patología Mamaria, permite al cirujano plástico crear una mama muy similar en textura, forma y características a las no operada.
La reconstrucción mamaria no solo recrea una mama de aspecto natural (areola y pezón incluidos), sino que elimina la necesidad de llevar prótesis externas, corrige el hueco que puede quedar en el tórax tras la mastectomía y ayudar a recuperar la imagen corporal, lo que aporta una mayor estabilidad emocional y, sobre todo, una mejor calidad de vida.
Días previos a la operación
En este punto, lo primero es señalar que es totalmente normal sentir cierta ansiedad antes de la operación, por lo que es importante tratar de ocupar la mente con otras cuestiones. Podemos aprovechar los días previos para ordenar la casa y dejarla preparada que a la vuelta lo tengamos todo organizado para descansar sin problemas. Es bueno dedicar tiempo a aquellas actividades que más nos gustan para sentirnos tranquilas. Conviene dormir bien el día antes.
Fuente: ellahoy.es